Quiero ser maga
Este anime anime que sigue la historia de Kurumi Mirai, una joven que sueña con convertirse en maga. A pesar de su excepcional talento y arduo trabajo, no logra ser aceptada en el curso principal de la prestigiosa Academia Rettoran.
Sin desanimarse, Kurumi se une al curso estándar y conoce a un diverso grupo de compañeros de clase, cada uno con sus propias personalidades únicas y aspiraciones. Su vida escolar da un giro cuando una profesora de tamaño pequeño, llamada Minami Suzuka que por una extraña razón desea que los alumnos aprendan magia.
Con su motivación Kurumi va aprendiendo a hacer magia mientras descubre una especie de magia extraña que anula ciertos aspectos de los usuarios de esta no pueden utilizarla de manera normal. A pesar de que, como es obvio, no sabe usarla y le cuesta trabajo aprenderla o debe de hacerlo a la marcha.
Amistad, sueños y chicas mágicas
Este anime escondido entre una temporada donde hay grandes como Re:Zero, por ejemplo, se podría catalogar en esa categoría de joyitas escondidas. Mi opinión general y la primera impresión que tuve es que Kurumi es de esos personajes protagónicos bastante ingenuos, llenos de motivación. Kurumi resulta ser torpe pero es la llave para que sus compañeros empiecen a interesarse en la magia.
Sin saberlo (y es que la historia no sabe ocultarlo mucho) es que Kurumi es especial, como muchos protagonistas de anime. No es que sea algo malo, pero sabes que al final, Kurumi va a solucionar el problema que se estará gestando desde el comienzo de la historia. Al ser un anime que resalta el trabajo en equipo, la amistad y la magia, seguro será ayudada al final de la historia
Bajo el nombre en inglés: The Stories of Girls Who Couldn't Be Magicians (Las Historias de las Chicas que no Podían Ser Magas) Es una historia divertida. Lo que me gustó es que los escenarios de este anime están dibujados de una manera que puedo llamar artística y hasta caricaturesca. Se nota que es un estilo diferente al diseño de personajes, lo que lo hace atractivo de ver. Mágico, sería una palabra clave.
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